Está claro que la celiaquía es una de las enfermedades más complejas que ha conocido la humanidad. Durante años se ha buscado cómo combatirla, sin que hubiera demasiado éxito, aunque en la actualidad se han ido incorporando más alternativas respecto al gluten, y ella de ellas son los productos fermentados, y con mayor razón, la kombucha.
¿Es realmente la kombucha una opción para los celíacos? Pues definitivamente sí, ya que no hay presencia en esta bebida de ningún componente que pudiera resultar contraproducente para los celíacos. Todo lo contrario, los probióticos de la kombucha pueden ser potencialmente una oportunidad contra la celiaquía.
Habiendo expuesto todo lo anterior, ya tenemos definido el contexto para desarrollar a profundidad el tema, cosa que haremos a continuación.
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¿Es la kombucha libre de gluten?
El punto critico de los celíacos es la presencia de gluten en las comidas, que es una proteína derivada del trigo, cebada y centeno, que les provoca una reacción inmunológica con una sintomatología bastante diversa, por lo que se debe tener mucha precaución si el alimento en cuestión contiene o no gluten.
En el caso de la kombucha, podemos afirmar que está libre de gluten, ya que en su estructura no hay un solo elemento relacionado con él. Además, ha sido catalogada como segura para su consumo por quienes no deben ingerir gluten.
En ese sentido, no existe dentro de la kombucha ningún compuesto que pudiese alterar o causar una reacción en alguna persona que sufra de celiaquía, empezando precisamente por el gluten[1], que es de entre todos el más riesgoso. Y lógicamente, para esto debía de haber una explicación.
Para comprender por qué la kombucha está a salvo del gluten debemos remitirnos a su proceso de fabricación. La kombucha es un producto que se elabora gracias a la fermentación del té, por lo que es fácil deducir que no contiene gluten, ya que el te dista de aquellos componentes que poseen esta proteína, y la fermentación no generará espontáneamente gluten.
Sumado a todo eso tenemos que la propia Gluten Intolerance Group ha certificado a la kombucha como una opción para pacientes con celiaquía[2]. Esto por supuesto en vista de la composición de su estructura. Con todo, te recomendamos que la consumas de manera moderada para que tu organismo se adapte mejor.
¿Pueden los probióticos de la kombucha ayudar a los celíacos?
Por supuesto que sí. Primeramente hay que recordar que los celíacos tienen la condición de que no pueden ingerir gluten. La kombucha, libre de dicho componente, no representa un riesgo. Pero es que además de eso puede fortalecer la microbiota intestinal gracias a los probióticos y otros elementos.
Recordemos que la condición de celiaquía les ocasiona a las personas diversos problemas en el intestino delgado si ingieren gluten[3]. Es por eso que la kombucha se ha ido posicionando como un fermentado apto para estas personas. Y lo mejor es que ahí no se acaba todo.
Si bien la bibliografía académica ha tenido muy poca investigación que involucre a personas, se han hecho estudios en diversos animales que sugieren que los probióticos, enzimas, vitaminas y ácidos orgánicos que contiene la kombucha, tienen un efecto importante en la salud de los intestinos, tanto para reforzar sus paredes como para prevenir agentes patógenos. [4]
Basándonos en lo anterior podemos intuir sin demasiada dificultad que la kombucha mejorará a largo plazo tu digestión. Mientras más te acostumbres a ingerirla más estará estimulando cada uno de los intestinos. Por tanto, los nutrientes tardarán menos tiempo en ser absorbidos. En resumen esta bebida es una opción incomparable para que tengas buena salud intestinal.
¿Con qué otros fermentados puedo complementar?
No sería mala idea que pudieras complementar la kombucha con otros productos fermentados sin gluten. La verdad es que la variedad de fermentados libres de gluten que existen son muchos por lo que de momento, te daremos 3 opciones.
Evidentemente, existen muchos más fermentados libres de gluten, pero en esta ocasión solo te daremos 3 opciones, las cuales son:
Kéfir
En el mundo de los fermentados, uno que no puede faltar es el kéfir, ya que contiene una gran cantidad de probióticos, fundamentalmente de la cepa lactobacillus, que contribuyen de una buena forma en nuestra salud intestinal.
El kéfir es muy parecido al yogur que tiene como materia prima la leche, un producto que es libre de gluten.
Puedes revisar un artículo muy interesante que hemos redactado, haciendo una comparación entre el kéfir y la kombucha, donde se ven las principales similitudes y diferencias que tienen ambos productos.
Hidromiel
Tradicionalmente vemos el hidromiel como una simple bebida para acompañar el paladar. Sin embargo, lo cierto es que puede serte de gran utilidad para acompañar la kombucha, porque también es una bebida fermentada sin gluten. Esto se debe, por supuesto, a los ingredientes que contiene.
En la fabricación del hidromiel interceden primeramente el agua y la miel propiamente dicha. Ambos luego pasan por un proceso de fermentación en el que se utiliza la levadura. A partir de aquí puede añadirse especias, té verde, lúpulo y hasta frutas. Claro está, en función de la combinación obtendrás una bebida distinta.
El caso es que ninguno de esos ingredientes contiene gluten. Por ese motivo, como fermentado es una muy buena opción para los celíacos. Su consistencia y sabor dependerá mucho de la cantidad de cada ingrediente que uses, pero en un todo se asemeja bastante a la kombucha.
Yogur natural
El yogur es por naturaleza un producto fermentado. En su caso las bacterias utilizadas son del tipo lácteo. Sea como sea, por su estructura este es un fermentado que no viene con gluten, así que podrías consumirlo junto a la kombucha.
No obstante, hemos de aclarar que no todos los yogures son válidos. Solamente los naturales están permitidos para los celíacos. Los que vienen con sabores especiales o que son ediciones con muchos componentes artificiales quedan descartados. Evítalos a toda costa.
Fermentados que tienen gluten
Si ya te ofrecimos algunas opciones para suplementar la kombucha, también debemos prevenirte contra aquellas bebidas fermentadas que suponen un riesgo para ti si eres celíaco. Los niveles de gluten en cada una son lo suficientemente elevados como para comprometer tu seguridad:
Cerveza tradicional
En el apartado anterior te ofrecimos la cerveza artesanal. Precisamente lo hicimos porque la tradicional es cualquier cosa menos una bebida segura para celíacos. Esto se debe primordialmente a que en su fabricación se utiliza cebada, que es un cereal, y malta.
Ambos ingredientes se caracterizan por contener naturalmente gluten en su estructura. Esta realidad se aprecia también en muchas cervezas modernas que intentan ofrecer sabores nuevos al público. Ten cuidado, porque a pesar de que la apariencia externa sea distinta la fórmula es la misma.
Sangría
La sangría es otra bebida muy conocida por sus niveles de gluten. Si bien es cierto que algunos fabricantes ofrecen alternativas menos riesgosas para los celíacos, no te recomendamos fiarte de eso. Después de todo, se trata de tu vida.
Cabe destacar que según el país del que se trate la sangría llevará ingredientes diferentes. No obstante, los más básicos siempre están presentes.
Pan de masa madre
El pan de masa madre es quizás uno de los fermentados más antiguos de la historia humana. A lo largo del tiempo se han producido ligeros cambios en su elaboración, pero la fermentación nunca ha dejado de estar presente en el proceso.
Gracias a esa fermentación es como hoy en día este pan es otra de las opciones con las que se suele dar esperanza a los celíacos. Sucede que en el pan de masa madre el gluten se reduce mediante todos los elementos que lo fermentan. Por lo tanto parece ideal tanto para celíacos como para los que tienen una mínima sensibilidad al gluten.
Sin embargo, la reducción no es óptima, y además no se ha podido comprobar que el pan realmente sea apto para celíacos. Cabe resaltar que existen variantes del pan de masa madre, pero no hay que perder de vista que, incluso si cambian los ingredientes, el proceso de fabricación sigue siendo el mismo.
¿Por qué hacer de la kombucha tu método para combatir la celiaquía?
Tras todo el recorrido que hemos hecho, ¿es la kombucha una buena herramienta para combatir la celiaquía? Realmente no se puede afirmar como tal ya que la mayoria de los beneficios de la kombucha no han sido probados en humanos.
Al estar libre de gluten, no hay posibilidad de que la kombucha cause estragos en tu organismo. Si eres celíaco puedes consumir este fermentado sin el menor riesgo, ya sea que tu sensibilidad al gluten sea muy elevada o muy reducida.
Por otro lado, como ya vimos la kombucha no es un fermentado con un solo beneficio para tu cuerpo. Además de contribuir al equilibrio de la flora intestinal puede hidratarte muy bien. A la par, sus propiedades antioxidantes fortalecerán tu inmunidad. Todo ello en conjunto te ayudará a estar en un mejor estado, lo cual te vendrá bien para contrarrestar los efectos del gluten. [5]
De esa forma damos por terminado este artículo. No te preocupes, continuaremos trayéndote toda la información que vaya surgiendo sobre la kombucha y los fermentados, para que cada vez puedas sanar más tu celiaquía.
[1] https://www.researchgate.net/publication/339723725_Kombucha_Tea_Fermentation_A_Review
[3] https://celiac.org/about-celiac-disease/what-is-celiac-disease/
[4] https://onlinelibrary.wiley.com/doi/pdf/10.1111/1541-4337.12073
[5] https://pdfs.semanticscholar.org/d450/1bf760406ddd65a62650e59d240647c6a925.pdf