Kéfir de Leche frente a una Intoxicación Alimentaria

Kéfir de Leche frente a una Intoxicación Alimentaria

Desde hace tiempo se ha ido estudiando la relación que existe entre consumir productos alimenticios funcionales fermentados y su acción benéfica en la salud y ha sido comprobado con evidencia científica la implicación del microbiota intestinal y la participación de los probióticos en el microbiota.

Según el Centro Para el Control y Prevención de Enfermedades, estiman que la mayoría de las intoxicaciones alimentaria son producidas por cinco microorganismos conocidos como son: el Norovirus, Salmonela, Clostridium Perfigren, Campylobacter spp. Y Staphylococcus Aureus. [1]

Sin embargo, la Echerichia Coli también entra en él perfil y son causantes de hospitalizaciones graves y muertes si no se neutralizan rápido.

Aquí es donde entra el Kéfir de leche como alimento funcional y su participación probiótica, según varios estudios en animales in vivo plantean el kéfir como posible potencial antimicrobiano frente a los distintos microorganismos tóxicos y su capacidad protectora de la mucosa intestinal fortalece las defensas para el combate contra la intoxicación alimentaria.

Es importante mencionar que la mayoría de los estudios han sido evidenciado en experimentos con animales, sin embargo, no se descarta la posibilidad de su uso en intoxicaciones alimentarias dando resultados favorables en humanos.

A continuación, iremos desglosando con más detalle la relación que existe entre consumir kéfir de leche y una intoxicación alimentaria.

¿Puede el kéfir de leche ayudar con la intoxicación alimentaria?

El kéfir de leche puede ayudar con la intoxicación alimentaria por su efecto antimicrobiano contra microorganismos tóxicos proveniente de los alimentos que tratan de invadir toda la zona del tracto digestivo. [2]

El kéfir contiene las bacterias ácido lácticas que van a contrarrestar las toxinas mediante la colonización, la disminución del pH intestinal para acidificar y liberando bacteriocinas que se van a encargar de inhibir el crecimiento de microorganismos tóxicos a nivel intestinal. [2] [3]

Esta actividad funcional del kéfir ha sido estudiada a través de experimentos in vivo en animales y en humanos, dando resultados favorables como antibacteriano frente a bacterias nocivas frecuentes que se encuentra en los alimentos, Echerichia coli, Salmonella, Clostridium diffcile, Shigella Disentería y Estafilococos Aureus. [2]

Incluso ciertas especies de las Bifidobacterias tienen efecto de inhibir el crecimiento de Echerichia Coli como bacteria oportunista y frecuente de encontrar en distintos alimentos. [1]

La flora bacteriana también se encarga de mantener un equilibrio entre las células nerviosas del huésped y el ambiente intestinal, y cuando hay una sobre carga externa por diferentes microorganismos tóxicos, puede ocasionar un desequilibrio del mismo, activándose el sistema nervioso en caso más grave.

Cuando ocurre este desequilibrio, el consumir kéfir puede ayudar a restablecer la flora intestinal manteniendo el equilibrio del individuo dentro de su entorno ambiental.

¿Es bueno el kéfir de leche después de una intoxicación alimentaria?

Es frecuente que las intoxicaciones a causa de microorganismos dañinos como el Clostridium, el Campylobacter, Echerichia Coli, Estafilococos Aureus, entre otros, desarrollen síntomas de inflamación intestinal, por las sustancias tóxicas que producen en la mucosa digestiva.

Por este posible motivo es bueno consumir kéfir de leche durante y después de una intoxicación alimentaria.

Existen estudios científicos que avalan la propiedad antiinflamatoria del kéfir y esto lo hace mediante su efecto inmunomodulador, es decir, que activa en la mucosa digestiva la producción de inmunoglobulina A, un tipo de anticuerpo de primera línea de defensa, frente a toxinas y a colonización e invasión de bacterias nocivas protegiendo la zona digestiva. [2]

Otro aspecto como efecto protector de los probióticos del kéfir es mantener los niveles adecuados de linfocitos reguladores para disminuir las reacciones inflamatorias ocasionadas por las toxinas de los microorganismos. [2]

Es muy frecuente que podamos ingerir alimentos contaminados y no producir síntomas de forma inmediata, por tal motivo, si incorporamos el kéfir dentro de nuestros hábitos alimenticios saludables, se puede mantener reconfortada la flora bacteriana intestinal y así evitar los síntomas posteriores a la intoxicación. [4]

¿Puede el kéfir de leche ocasionar intoxicación alimentaria?

Al pesar de contener bacterias probióticas, el kéfir es un alimento como cualquier otro y si no se tiene la adecuada manipulación e higiene al momento de su elaboración puede crecer en su medio ambiente microorganismos oportunistas contaminando el producto y ocasionar una intoxicación a la hora de consumirlo.

Por mencionar algunos ejemplos en el cual se puede correr el riesgo de contaminar el kéfir es cuando utilizamos:

  • El agua de grifo por su contenido de cloro.
  • Utilizar una leche de baja calidad (reconstituida o en polvo).
  • La falta de realización previa de esterilización de los envases de cristal.
  • El llenado completo de bebida en el recipiente sin darle espacio oportuno para su adecuada oxigenación, así como el medio ambiente correcto.

En cuanto a su consumo del kéfir, existe poca evidencia científica que avalen si las altas dosis de kéfir pudiesen ocasionar una intoxicación. Las mayorías de los estudios se realizaron in vivo en animales a fin de alimentarlas con dosis normales y altas de kéfir, y en ambas ratas con diferentes dosis no llegó a perjudicar en la salud de estos animales. [5]

Sin embargo, en forma de recomendación es que las personas primerizas en consumir esta bebida inicien con una dosis de 250 ml, que equivale a una taza por día, y poco a poco ir aumentando a medida de tolerancia de la persona, con una dosis normal y de consumo regular se puede asegurar de obtener los beneficios deseados de esta bebida y así mismo reducir posible intoxicación de este producto.

En resumidas cuentas, no hay otras probabilidades que el kéfir de leche pudiera ocasionar una intoxicación o por lo menos no existen estudios científicos que lo avale, salvo en aquellos casos de mala higiene en la manipulación del producto.

¿El kéfir de leche es bueno para el virus estomacal?

El kéfir refuerza el sistema inmune para suprimir infecciones causadas por distintos virus (incluidos estomacales) por su efecto inmunoestimulante y así posiblemente evitar que el virus se logre replicar luego de haber infectado los distintos tipos de células en el individuo. [6]

Por ejemplo, tenemos las enfermedades estomacales causadas por el virus rotavirus tanto en niño como en adulto, caracterizado por vómitos y diarrea líquida que pueden llegar a durar por 3 o más días acompañados de fiebre y dolor estomacal.[7]

Existen estudios en donde recomienda utilizar el kéfir de leche como suplemento dietético protector contra la infección viral. Estos mecanismos antivirales se valen en la implicación de mejorar y estimular la producción de células defensoras como los linfocitos T reguladores y la inmunoglobulina A que se encarga de proteger la mucosa intestinal. [8]

Pero también ayudar a estimular las células de ataque para combatir el virus como son los macrófagos, los linfocitos B, linfocitos T de tipo Th1 para fagocitar los virus, las bacterias y los hongos, liberando citocinas como la interleucina IL2, e interferones. Promueven los CD4 y CD8 para diferenciar entre los microorganismos sanos y tóxicos. [8]

¿Es bueno consumir el kéfir de leche después de vomitar?

Si los vómitos no se detienen, nada se logrará ingiriendo inmediatamente el kéfir de leche, en vista que ningún mineral que aporta el producto será absorbido en el tracto digestivo porque otra vez será expulsado el contenido a través del vomito.

Por lo tanto, lo prudente sería comenzar a consumir el kéfir de leche en el momento en que paren los vómitos.

Incluso después del vómito, las personas pueden estar un poco intolerante a cualquier líquido o comida y esto es porque el sistema nervioso que controla el reflejo neuronal del vómito queda hipersensible y más si se está expuesto a una infección intestinal.

Se recomienda de 2 a 4 horas aproximadamente después que se vomita, para darle paso a la relajación del intestino, ya que, si se ingiere inmediatamente después de la expulsión del contenido gástrico, los movimientos propios del intestino se activan por reflejo nervioso vagal para hacer la digestión y esto estimulará aún más el sistema nervioso que controla el reflejo vagal, produciendo más expulsión del contenido y por lo tanto más perdida de líquido.

En este caso, lo más ideal es que las personas asistan a buscar ayuda médica si este síntoma no cesa a transcurrir el tiempo. Se recomienda es no consumir absolutamente nada mientras sea atendido por entes de la salud.

¿El kéfir de leche puede ayudar a combatir los parásitos estomacales?

Análogamente al escenario de los virus estomacales, el kéfir de leche puede ayudar a combatir los parásitos estomacales mediante los mecanismos ya discutidos.

El kéfir puede fortalecer la barrera intestinal, evitando el acceso de los parásitos y de tal forma afectar la absorción de los nutrientes.

La mayoría de los parásitos contraídos por alimentos mal cocidos son expertos en destruir la mucosa del intestino, afectando el lumen, que es donde se produce la absorción de nutrientes de los alimentos.

En un estudio experimental con ratas infectadas con Giardia Intestinalis (Parásito) se les administró por vía oral Albendazol (fármaco antiparasitario) junto con Lactobacilos Casei, un probiótico contenido en el kéfir, sugiriéndose como una gran alternativa para el tratamiento de desparasitación.[9]

Otras revistas científicas aprobaron este mecanismo bioactivo del propio kéfir a través de experimentos en animales, en el cual fueron alimentadas con la leche fermentada del kéfir, la administración de este producto dio resultados favorables disminuyendo la intensidad de la infección por Giardia a los 7 días posteriores a la infección. [10]

En conclusión, el consumo de kéfir de leche en combinación con la terapia antiparasitaria puede llegar maximizar el efecto de eliminación de parásitos y a su vez fortalecer la flora bacteriana intestinal.

Aunque estos estudios hayan sido comprobados en animales, faltaría más estudios en humanos que compruebe con más efectividad su uso beneficioso en personas infectada con Giardia. Lo que si queda claro es que el consumir el kéfir de leche regularmente tiene alta potencialidad de consolidar el sistema inmune y la flora bacteriana frente a diferentes microorganismos nocivos para nuestra salud.

De momento, esto es todo lo que podemos decir sobre consumir kéfir de leche frente a una intoxicación alimentaria, así que para mantenerte aún más informado, puedes leer alguno de los siguientes artículos.


[1] https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC7150249/

[2] https://www.redalyc.org/pdf/339/33951621003.pdf

[3] https://www.redalyc.org/journal/339/33951621002/html/

[4] https://www.nhs.uk/translationspanish/documents/food_poisoning_spanish_final.pdf

[5] https://www.researchgate.net/publication/264642336_Evaluation_of_the_subchronic_toxicity_of_kefir_by_oral_administration_in_Wistar_rats

[6] https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0753332220311665

[7] https://www.cdc.gov/rotavirus/clinical-sp.html#:~:text=Caracter%C3%ADsticas%20cl%C3%ADnicas,p%C3%A9rdida%20del%20apetito%20y%20deshidrataci%C3%B3n.

[8] https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/33186795/

[9] https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/23559378/

[10] https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/24072759/